Cooperativas Agro-alimentarias de Huelva ha clausurado en la mañana de hoy, con la presencia de veinticinco ingenieros agrícolas, la tercera edición del curso técnico ‘Producción integrada en fresas’, iniciado el pasado martes 14 de noviembre y dirigido de manera exclusiva a los técnicos de las cooperativas onubenses del sector.
El objetivo ha sido el de reforzar el conocimiento relativo a los métodos de cultivos y acciones medioambientales destinadas a conseguir producciones más sostenibles. La producción integrada tiene su fundamento en el empleo de técnicas y tecnologías más respetuosas con el medio ambiente, que parten de un conocimiento agronómico exhaustivo de los mecanismos naturales del cultivo y su interacción con el medio que le rodea, para así optimizar el empleo de los insumos y adecuar los consumos.
A lo largo de estas dos jornadas de trabajo, que han tenido lugar en el hotel Hacienda Montija de Huelva, cuatro profesionales del sector han profundizado en los principales asuntos relacionados con la materia a tratar en este encuentro. En este sentido, la pasada semana fueron Antonio Domínguez, del departamento de Producción Vegetal de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica de Huelva (ETSIA), y Francisco Javier Pagán, asesor técnico de Symborg, los encargados de analizar, respectivamente, los aspectos claves en el diseño de la fertirrigación, así como el uso de microorganismos rizosféricos como base para incrementar el potencial productivo.
El turno ha sido hoy para Juan de Dios Franco, director del departamento de I+D+i en Agricultura de Gmb Ozone y doctorando en el IRNAS-CSIC, y para Antonio Alcázar, director técnico de Zerya, quienes han orientado su intervenciones, en el primer caso, hacia la aplicación técnica del uso del ozono en la agricultura, y, en el segundo, hacia las bases para la mejora de la nutrición y sus efectos en la fisiopatología.
Con esta tercera edición, la federación provincial, en el marco de sus ejes estratégicos, consolida una iniciativa formativa puesta en marcha en noviembre de 2015, y que se ha mantenido en el tiempo dada la buena acogida y el interés despertado entre las cooperativas de fresas y frutos rojos onubenses, muy concienciadas con las prácticas sostenibles y el respeto medioambiental. No en vano, todas las cooperativas de la provincia, donde se concentra más del 95% de la producción de fresa y frutos rojos a nivel nacional, efectúan control biológico en sus producciones.
Para la presente campaña 2017-2018, se han plantado en Huelva en torno a 5.900 hectáreas de fresa, que, junto a las 2.100 de frambuesa, 2.900 de arándano y 180 de mora, representan más de 11.000 hectáreas totales, suponiendo un crecimiento del 11% en la superficie destinada a frutos rojos en relación al ejercicio pasado.