Ante el inminente comienzo de las principales campañas agrícolas, Cooperativas Agro-alimentarias de Córdoba muestra su preocupación por la posible falta de mano de obra. Esta escasez, que ya se puso de manifiesto en la campaña 2017-2018, se acrecentará en la actual, dificultando las campañas de recolección de aceituna y cítricos. Este déficit se presenta especialmente relevante en los municipios de la sierra.
En anteriores ejercicios, la falta de jornaleros se solventó a través de contingentes de trabajadores contratados en otras zonas, una medida que funcionó sin incidencias y de un modo absolutamente organizado. Por ello, la federación defiende que la solución a este importante problema habrá que buscarla, de igual modo, mediante la tramitación de un contingente de trabajadores extranjeros, en esta ocasión ucranianos, que se trasladarían para la campaña y regresarían a su país de origen al término de la misma, como se hizo anteriormente.
En línea con lo anterior, desde Cooperativas Agro-alimentarias de Córdoba piden a las diferentes administraciones responsables que muestren la máxima comprensión hacia esta delicada situación, facilitando los trámites necesarios para su puesta en marcha, de modo que no se ponga a los agricultores en mayores aprietos.
Aunque puede parecer un contrasentido que esta falta de jornaleros coincida con un alto porcentaje de población activa en paro, desde la federación recuerdan que para trabajar en la recogida de aceituna y cítricos se requiere una mano de obra que mantenga una capacidad física adecuada, y no todas las personas cuentan con esta cualificación.
Asimismo, ante la imposibilidad de contratar a trabajadores españoles, Cooperativas Agro-alimentarias de Córdoba insiste en que este es el último recurso que les queda a los agricultores para no dejar las cosechas sin recoger. De hecho, de no ser absolutamente necesario, ningún agricultor estaría dispuesto a soportar los altos costes que lleva consigo contratar a trabajadores extranjeros, ya que tienen que asumir el proceso de selección, el transporte desde Ucrania a Córdoba o el coste de alojamiento, todo ello con dificultades adicionales de comunicación por el idioma.