Las lluvias torrenciales del pasado fin de semana, que dejaron prácticamente 400 litros en veinticuatro horas en municipios malagueños como Campillos y Teba, han provocado cuantiosos destrozos y pérdidas en sus cooperativas. Concretamente, se han visto muy afectadas la cooperativa ganadera Nuestra Señora de los Remedios-Picasat y la olivarera Nuestra Señora del Rosario.
Los daños en la primera ya han sido cuantificados en 750.000 euros, mientras en la segunda se calcula que pueda rozar una cantidad similar.
Según explica el gerente de Cooperativas Agro-alimentarias de Málaga, Carlos Cintas, el agua y el barro han arrasado las instalaciones de Campillos, donde se han perdido considerables cantidades de materias primas, como cereales y piensos. Según el responsable, la valla perimetral, los cerramientos y los motores también han quedado destrozados.
Por lo que respecta a la cooperativa de Teba, el agua entró por la puerta y se extendió al resto de las instalaciones, afectando la aceituna de verdeo y cereales almacenados; a las oficinas, la tienda y la maquinaria industrial.
Además de las cooperativas, donde se continúa cuantificando los daños, estos días también se recopilan datos de agricultores y ganaderos damnificados que, a buen seguro, incrementarán considerablemente las pérdidas totales en el sector malagueño.
Si bien Carlos Cintas asegura que las cooperativas se encuentran aseguradas, pide a la Administración “agilizar al máximo la limpieza de los cauces de los ríos, tanto públicos como privados”, así como aportar soluciones al “calvario administrativo que hay que seguir para poder adecentar los cauces particulares”. En cuanto a los públicos, asegura “nos acordamos a destiempo y cuando pasa algo”.
Finalmente, el gerente de Cooperativas Agro-alimentarias de Málaga pide que las ayudas lleguen cuanto antes a las cooperativas y el sector para recobrar la normalidad de la actividad a la mayor brevedad.