Federación, Frutos secos
El Grupo de Trabajo de Frutos Secos de Andalucía, con participación de las organizaciones agrarias (ASAJA, COAG y UPA), Aeofruse (Asociación Española de Productores de Frutos Secos y Algarrobas) y Cooperativas Agro-alimentarias, se ha reunido para estudiar la evolución de la almendra y realizar la primera estimación de campaña, con 16.525 toneladas aforadas, frente a las 10.500 del ejercicio anterior.
Se trata de un incremento significativo, que responde, fundamentalmente, a la actualización de la superficie en producción, obtenida de los datos oficiales aportados por la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, así como a la entrada en producción de nuevas plantaciones. En consecuencia, el número de hectáreas de cultivo ha crecido hasta situarse en 145.693.
En este contexto, Granada, con 5.532 toneladas, es la principal provincia productora, con una cantidad que podría haber sido incluso superior de no haber mediado las heladas, las cuales afectaron principalmente a las variedades tradicionales en el norte.
Por su parte, de confirmarse la previsión, Almería producirá 4.893 toneladas, al no haber sido tan castigada por las condiciones meteorológicas. Más favorable ha sido la meteorología en Málaga donde se esperan este año 2.280 toneladas de almendra.
En el resto de Andalucía, gracias a las lluvias y a la ausencia de heladas, se obtendrán 3.820 toneladas, destacando, Sevilla, con 2.342, y Córdoba, con 711, las dos provincias con mayor entrada de superficie en producción. Le siguen Jaén, con 443; Cádiz, con 196; y, finalmente, Huelva, con una estimación de 128 toneladas de almendra en grano.
Por otra parte, el análisis por variedades arroja un protagonismo casi exclusivo de la Comuna, con 14.872 toneladas, seguido de la Marcona, con 992, y la Largueta, con 661. Con estos datos, la variedad Comuna pasa a representar el 90% de la producción de almendra en Andalucía, situándose la Marcona en el 6% y la Largueta en el 4%.
En el conjunto de España, tras la actualización de datos, las 16.525 toneladas de almendra andaluza supondrán un 28,6% de las 57.753 toneladas previstas a nivel nacional. En cualquier caso, la evolución meteorológica de los próximos meses será clave y determinante en la producción final.
Federación
Los días 4 y 5 de octubre, todo el sector agroalimentario andaluz tendrá una cita ineludible en Jaén. Así lo han anunciado hoy los representantes de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía durante la inauguración de la XVIII Expoliva, que estos días se celebra en el Recinto Provincial de Ferias y Congresos (IFEJA), lugar que acogerá, asimismo, el 5º Congreso de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía.
Se trata de un evento único que, cada cuatro años, tiene lugar una provincia diferente y que ha recorrido ya Sevilla (2001), Almería (2005), Huelva (2009) y Granada (2013), con la participación de profesionales y ponentes de reconocido prestigio, autoridades regionales y nacionales, así como la asistencia de más de 700 personas, según inscripciones en la última convocatoria.
En esta ocasión, y bajo el lema ‘Creando, creciendo, cambiando’, el objetivo del 5º Congreso de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía será trasladar al sector y la opinión pública en general, la contribución del mundo cooperativo no sólo al desarrollo del sector agroalimentario, sino también al económico, social y medioambiental; su constante e imparable crecimiento; así como su gran capacidad para adaptarse a los cambios y las demandas de los mercados y los consumidores.
De esta manera lo han trasladado los responsables de la federación, encabezados por el presidente, Juan Rafael Leal Rubio, durante el acto de inauguración de la feria y la visita a su espacio expositor de, entre otras autoridades, la ministra y la consejera de Agricultura, Isabel García Terina y María del Carmen Ortiz Rivas, respectivamente, presencias habituales en congresos anteriores.
Autorregulación del sector
Aprovechando el encuentro con las titulares del ramo, el presidente del sector oleícola en Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, Cristóbal Gallego Martínez, ha subrayado el contexto de optimismo en el que se celebra esta nueva edición de Expoliva, debido a las buenas cifras de precios y salidas al mercado en la campaña, al tiempo que ha insistido en la necesidad de continuar trabajando en la propuesta de autorregulación de la oferta, promovida por la federación.
Sobre este tema, ha resaltado que se trata de una medida que beneficiaría tanto a productores como a consumidores, evitando que se produzcan las fluctuaciones y picos de precios tanto en origen como en punto de venta. De hecho, Cristóbal Gallego Martínez ha incidido en que las variaciones para los consumidores suelen ser mínimas, en comparación con la diferencia de precios en origen para lo que ha hecho referencia a datos oficiales.
Según estadísticas del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA), para el período comprendido entre 2010 y 2015, cuando los agricultores recibían un precio mínimo de 1,79 euros por kilo de aceite de oliva, los consumidores pagaban 3,52 euros. En cambio, durante el momento más álgido, cuando los primeros percibían 4,11 euros por kilo, los segundos desembolsaban 4,75 euros por la misma cantidad, datos que evidencian que un diferencial del 130%, entre precio más bajo y alto en origen, se tradujo tan sólo en una variación del 35% en el mercado.
En consecuencia, Cristóbal Gallego Martínez ha hecho hincapié en que, ante la gran variabilidad de producciones y su incidencia en los precios, se hace impostergable la aplicación del artículo 209 y 210 del Reglamento 1308/2013 de la Organización Común de Mercados de los Productos Agrarios, que permitiría autorregular la oferta entre campañas y adecuarla a la demanda a través de las organizaciones de productores y sus asociaciones en el sector.
La propuesta ya está en Europa, ante lo que el representante ha instado al Ministerio de Agricultura a no escatimar esfuerzos para que la medida salga adelante, a fin de lograr estabilidad económica en el sector y evitar sobresaltos en el consumo.
Federación
Cumplido un mes desde el inicio de la acampada de los regantes frente a la Delegación de Medio Ambiente de la Junta en Huelva, la federación alerta de que la problemática del agua en los regadíos del Condado dista mucho de resolverse. En este sentido, la Administración continúa sin ofrecer una regulación administrativa y jurídica, en línea con los compromisos políticos adquiridos en 2004.
Dicha regulación permitiría a miles de agricultores seguir desarrollando su actividad, al tiempo que generando riqueza y empleo en términos municipales que viven fundamentalmente de la agricultura.
Son varios los temas que continúan, a fecha de hoy, encallados. Por un lado, está pendiente de rematarse el trasvase de 4,99 hectómetros cúbicos, para el que no se precisa inversión económica, pues los agricultores ya realizaron los desembolsos pertinentes a fin de poder traer agua de una cuenca excedentaria, como es la del Tinto-Odiel-Piedras. En la actualidad, 222 hectáreas, excluidas de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), continúan sin recibir agua, si bien es cierto que la Junta de Andalucía remitió hace unos días el informe al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA), que es el organismo que ahora debe responder. Su visto bueno supondría enormes ventajas para la agricultura de la zona, que pasan por la disponibilidad de agua superficial y el cierre de 130 pozos.
Otra problemática tiene que ver directamente con la tierra y con el recorte de más de 1.500 hectáreas, sobre una superficie inicial aprobada de 9.340 en el Plan Especial de Ordenación de la Corona Norte de Doñana. Los municipios de Lucena del Puerto, Moguer, Almonte, Bonares y Rociana, eminentemente agrícolas, son los pueblos afectados por esta reducción, justificada ahora, en parte por la aplicación de la Ley Forestal de 1992, cuando los agricultores venían pagando de forma continuada el canon agrícola a los ayuntamientos desde los años cincuenta y la actividad en la zona se remonta, en algunos casos, a principios del siglo pasado. Para Cooperativas Agro-alimentarias de Huelva se trata de una situación injusta derivada de la falta de un estudio detallado de la cartografía y de las situaciones históricas de los agricultores y sus antepasados. Asimismo, la federación subraya que la superficie afectada supone menos de un 1% del entorno de Doñana, con más de 300.000 hectáreas repartidas por las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz, por lo que su mantenimiento, bajo prácticas totalmente respetuosas con el medio ambiente, no supone una amenaza para uno de los ecosistemas más valiosos y ricos de Andalucía.
Por último, y retomando el agua, Cooperativas Agro-alimentarias de Huelva resalta que existe un consenso general, tanto en el sector, como en la sociedad y otras organizaciones involucradas, en torno al origen superficial que debe tener el agua de uso agrícola en la zona. De hecho, recuerda que, gracias al trasvase de 4,99 hectómetros cúbicos, ya se han cerrado 260 pozos y que la solución definitiva pasa por una derivación de 15 hectómetros cúbicos desde la cuenca antes mencionada, perteneciente a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, la cual ha dado su conformidad en el Plan Hidrológico. El trasvase, que daría soluciones de futuro a 1.500 familias del Condado, de las que dependen 40.000 puestos de trabajo en la comarca, supone un 0,9% de la capacidad total de los embalses en la provincia de Huelva que, según el último dato actualizado del MAPAMA, están por encima del 85% y superan considerablemente el registro de hace una década.
En consecuencia, desde Cooperativas Agro-alimentarias de Huelva, organización miembro de de la Plataforma en Defensa de los Regadíos del Condado, se defiende a los agricultores acampados frente a la Delegación de Medio Ambiente, así como a todos aquellos afectados por la falta de soluciones reales y de futuro por parte de la Administración. Igualmente, la federación subraya que la concienciación medioambiental del sector, el cual produce bajo técnicas respetuosas con el medio ambiente, y pone el acento en la necesidad de conjugar agricultura y respeto al medio natural, sin poner en peligro la viabilidad económica de las explotaciones, de las cooperativas que dependen de su actividad y de los términos municipales que subsisten y crecen, desde tiempo inmemorial, gracias a la agricultura.
Cultivos herbáceos, Federación
La cooperativa Cocereales ha organizado hoy en Sevilla una jornada para conmemorar sus treinta años de trayectoria en el sector. El acto de inauguración ha corrido a cargo de los presidentes de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, Caja Rural del Sur y de la cerealista, Juan Rafael Leal Rubio, José Luis García Palacios y Alejandro Oliver López, respectivamente. Asimismo, el director general de Producciones y Mercados Agrarios, Fernando Miranda Sotillos, ha asistido en representación del Ministerio de Agricultura, Alimentación, Pesca y Medio Ambiente.
La jornada ha abordado los temas que afectan al sector, a modo de conclusiones finales de la misma «quedó patente que España es un país importador y que se necesita que no se reduzca la producción si bien existe una dependencia de los cambios bruscos del mercado de cereales y eso sólo se podrá afrontar, mediante la innovación y la unión de las cooperativas cerealistas como se ha venido haciendo desde hace 30 años en Andalucía y una prueba de ellos es el papel que juega como cooperativa de segundo grado la propia Cocereales».
Por su parte, el presidente de las Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, Juan Rafael Real Rubio, ha destacado el peso en la economía de región del sistema cooperativo que «ha sido el que mejor ha aguantado la crisis económica» de estos años. Asimismo, ha puesto en valor la importancia de Cocereales, que desde 1986 comercializa la producción de más de una veintena de cooperativas base, a su vez representante de más de 10.000 agricultores de las provincias de Sevilla, Huelva y Cádiz. Además, cuenta con una importante penetración comercial en los mercados regional, nacional y comunitario.
Federación
Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía ha celebrado recientemente una reunión sectorial de aceite de oliva en la que ha analizado los últimos datos de la evolución de la cosecha a nivel mundial. La federación ha constatado que, debido a las condiciones agroclimáticas acontecidas en la campaña, la estimación de producción realizada al inicio de la misma difícilmente podrá cumplirse.
Inicialmente, se estimaron para Andalucía 1.108.400 toneladas de aceite de oliva, de un total de 1.317.075 aforadas para todo el territorio nacional. Sin embargo, transcurridos los principales meses de cosecha, el balance ha revelado que se han producido únicamente 1.232.900 toneladas en España. El motivo ha sido el retraso en la maduración del fruto y la caída del rendimiento graso en las principales zonas productoras, por lo que la producción nacional se va a situar en torno a 1.270.000 toneladas.
En un marco global, si se comparan las primeras estimaciones mundiales de producción realizadas por el Consejo Oleícola Internacional (COI) en noviembre, con las realizadas por la Comisión Europea en los principales países productores hasta febrero, se confirman fuertes descensos productivos respecto la pasada campaña.
De esta forma, según estimaciones en Italia se van a producir sólo 190.000 toneladas de producción, frente a 474.600 toneladas de la campaña anterior. Por su parte, en Grecia, se prevén unas 180.000 toneladas, una gran diferencia respecto a las 320.000 del ejercicio precedente. Finalmente, en Portugal se aforan 83.000 toneladas en lugar de las 109.000 obtenidas el pasado año.
Si a estos descensos europeos, se suma la merma de la producción de países de la cuenca mediterránea, como Túnez, Marruecos y Argelia, se puede concluir que al final de esta campaña se registrará una caída mundial de aproximadamente un 20% respecto a la campaña anterior.
Por tanto, dado que el ritmo actual de salidas mensuales se sitúa en 123.200 toneladas y las disponibilidades a nivel mundial para los próximos 7 meses, son escasas en el resto de países, Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía considera que España es el mercado clave para abastecer la demanda mundial del aceite de oliva.
Esto se va a traducir en que, al final de la campaña, España tendrá el segundo stock más bajo de la serie histórica, alcanzando lo que se denomina “stock técnicamente cero”, ya que hay que cubrir la demanda hasta que la siguiente cosecha esté a pleno rendimiento, lo que suele darse bien entrado el mes de noviembre.