Las asambleas de las cooperativas San Isidro y Nuestra Señora del Rosario, de Fuerte del Rey, han aprobado por unanimidad la fusión de ambas entidades tras dos años de trabajo. La cooperativa resultante se denomina Óleo Rey y suma una base social de 447 agricultores y agricultoras, una superficie de 4.500 hectáreas de olivar y una producción que rondará los 13 millones de kilos de aceituna, en su totalidad de la variedad picual.
Con esta fusión, los responsables de la cooperativa buscan impulsar la rentabilidad de sus personas socias, “sobre todo en un contexto de tanta incertidumbre, con los precios de producción disparados y una cosecha que se resiente por la sequía”, coinciden Juan Francisco López y Manuel Sánchez, presidente y vicepresidente de la nueva entidad.
Según Juan Francisco López, hasta ahora presidente de San Isidro, «la fusión era una cuestión de tiempo dadas las similitudes de ambas entidades». Las dos comercializan su aceite de oliva a granel a través del grupo Interóleo y compartían cerca de un centenar de socios, «situación que provocaba ciertas distensiones según las condiciones de la campaña», explica.
Uno de los objetivos de la fusión es ser «una empresa más eficiente para obtener la mayor rentabilidad para los socios y las socias», sostiene Manuel Sánchez, hasta la fecha presidente de Nuestra Señora del Rosario. Además, trabajará para impulsar la apuesta por la calidad, el envasado y la comercialización propia. «La previsión es llegar a envasar el 10% de la producción bajos las marcas OleoRey y OleoFlor», avanza.
Junto a la calidad, la nueva cooperativa fomentará la innovación, la transformación de las explotaciones y la igualdad de la entidad. Muestra de ello es que el nuevo consejo rector incorpora a una agricultora, entre sus nueve miembros.
Óleo Rey empezará a funcionar como tal en la campaña 2022-2023. Lo hará en las renovadas instalaciones de la cooperativa San Isidro, donde además tendrá su sede social. La almazara de Nuestra Señora del Rosario, ubicada en el centro del municipio, se desmontará y se trasladará a la nueva sede.
El proceso ha contado con el respaldo de Cooperativas Agro-alimentarias de Jaén, cuyo gerente, Antonio Guzmán, recalca «el esfuerzo de ambos consejos rectores para hacer entender a la base social la importancia de unir sinergias para crecer y desarrollarse según las necesidades que marca el mercado». También destaca «la generosidad de los más de 400 olivareros y olivareras que han dado luz verde a una fusión muy necesaria para el desarrollo económico de Fuerte del Rey y que llevaba más de una década paralizada». Como recuerda Antonio Guzmán, «los procesos de integración y fusión son la llave de un modelo competitivo y adaptado a las nuevas tendencias y exigencias de mercado».
Las cooperativas también han contado con el asesoramiento económico y jurídico de Peraber Asesores, especializada en este tipo de procesos. Como explica su gerente, Rafael Peralta, «por sus similitudes, la fusión de ambas cooperativas en una sola es la mejor estrategia para fortalecer la competitividad de los agricultores de una zona muy castigada por la situación de sequía».
Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía ha participado en la fusión, dentro del proyecto ‘Servicio de asesoramiento para el fortalecimiento de cooperativas mediante los procesos de integración», includio en el expediente 120.831022.2.c financiado por el Fondo Social Europeo.