Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía traslada su profunda indignación por el resultado de la primera licitación al almacenamiento privado de aceite de oliva, medida aprobada por Bruselas y “vendida al sector” sin límite de cantidad ni importe máximo de ayuda, a fin de lograr “el reequilibrio del mercado”. Sin embargo, la realidad es que tan solo el 3% del volumen presentado, es decir, 3.650 toneladas, podrá almacenarse a un precio igual o inferior a 0,83 euros por tonelada al día.
Así lo aprobó ayer el Comité de Gestión de Mercados de la Unión Europea tras analizar las ofertas de España, lo que para esta federación es el resultado de la “farsa política” de la que está siendo víctima el sector oleícola nacional y, por ende, andaluz.
En opinión del presidente del Consejo Sectorial de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, Cristóbal Gallego Martínez, la medida del almacenamiento ha resultado “un caramelo envenenado” para los productores y cooperativas oleícolas, principales víctimas de los aranceles de Estados Unidos a la exportación de productos agroalimentarios.
“Desde el Gobierno de España y Europa se ha pretendido acallar a los oleicultores por la injuria de los aranceles, permitiendo en período electoral una medida que el sector llevaba toda la campaña pidiendo, para ahora no dotarla de presupuesto y previsiblemente provocar el efecto contrario al pretendido en el mercado”, explica el responsable.
A su entender, se evidencia que la no fijación del presupuesto en el reglamento comunitario lo que escondía era “lo que se está comprobando”, es decir, “racanear en el precio y no garantizar la aplicación de la medida” actuación que, consecuentemente, se traducirá en que tampoco se conseguirá reequilibrar el mercado ni recuperar las cotizaciones, “sino todo lo contario”.
Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía subraya que no se está haciendo políticamente lo necesario “ni todo lo posible” por este sector, líder a nivel mundial, buque insignia de la ‘Marca España’ en todo el planeta, así como motor económico y de empleo en el sur de España y en otras muchas comarcas españolas.
En línea con lo anterior, la federación recuerda que lleva muchos años trabajando en la autorregulación del sector, con especial implicación en la campaña 2018-2019, y que la medida está siendo incomprensiblemente ralentizada desde la Comisión Europea, a pesar de estar recogida en la reglamentación comunitaria. “Europa hace las leyes y luego no nos permite aplicarlas”, sentencia el presidente, quien ha convocado a las cooperativas andaluzas a una reunión urgente el próximo día 5 de diciembre.
Finalmente, desde Cooperativas Agro-alimentarias se pide al Gobierno de Andalucía que mantenga la posición firme y contundente ante la Administración de España, para que ésta ejerza “urgentemente y sin dilaciones” la mediación y fuerza política que el sector del aceite de oliva requiere ante Bruselas, de modo que no se destroce lo que tantos años, esfuerzo y dinero ha costado conseguir.